RAGE – ‘WINGS OF RAGE’

RAGE
‘WINGS OF RAGE’
Steamhammer

Ya en mis manos el nuevo disco de Rage que, después de 36 años en la escena desde que empezaran en 1984 como Avenger, siguen sonando espectaculares y frescos y con un sonido y estilo tan marcado que los hace inconfundibles. Después de multiples formaciones, solo Peavy Wagner sigue desde el origen y como leí hace poquito en una entrevista, el propio Peavy reconocía que Rage es su vida y su banda…

Decir que la nueva y actual formación me encanta, han encontrado la frescura y la naturalidad que habían perdido en el disco ’21’, último con Victor Smolski y André Hilgers. En Marcos Rodriguez y Vassilios Maniatopoulos, Peavy encontró a dos grandes músicos y grandes fans de la banda lo cual, desde mi punto de vista, ha ayudado a dotar de nueva frescura a la música de la Rage.
La portada de este ‘Wings of Rage’ es llamativa por los colores y por estar la mascota como sobrevolando un cementerio. Muy chula e ideal para lucir en camiseta.
En cuanto a lo musical tenemos 11 trallazos y una revisión de un clásico de la banda como es «Higher than the sky» y que después de varias escuchas me hacen plantearme cómo encararan las canciones en directo porque solo va un guitarrista. No entiendo la mania de la banda de llevar un solo guitarrista y grabar los discos como si existieran 2 guitarras.

Empieza el disco con aullidos de lobo y gritos humanos que desembocan en un ritmo que recuerda a la época de ‘Soundchaser’ con riff pesado y batería marcada que se acelera en la parte del estribillo y una melodía ideal para corear en directo y muy pegadiza. Tema clásico y típico de Rage, potente pero con la reminiscencia de épocas anteriores.
«Let them rest in peace» es el segundo corte y volvemos a escuchar a los Rage mas cercanos a la etapa de soundchaser. Tema con un sonido algo más oscuro en los riffs y mas melódico en los estribillos y puentes junto a un gran trabajo en las melodías y estribillos.
«Chasing the twilight zone» es el tercer corte y empieza con la melodía de la serie ‘La zona oscura’ (serie antigua de misterios) y que si cierras los ojos y no miras el disco te parece estar escuchando una canción de disco ‘Unity’ o ‘Soundchaser’. Melodías y ritmos evocadores de la mejor época de Rage para un servidor (la época de Victor Smolski y Mike Terrana). De hecho las partes de batería de este tema parecen hechas por el mismísimo Terrana.
«Tomorrow» es el cuarto tema, algo mas flojo desde mi punto de vista, algo más sencillo y menos cañero, sobre todo viniendo de los tres temazos anteriores. Un tema de relleno.
«Wings of Rage» es el siguiente tema y aquí sí volvemos a la caña de discos como ‘The missing link’ o ‘Black in mind’. Tema rápido y riffs pesados pero con estribillo pegadizo y más melódico y un gran trabajo de Vasslios en la batería. Mención aparte, a partir del minuto 3,46 del tema al 4,10 se marcan un trozo de estribillo ideado (desde mi punto de vista) para corear en directo y para “vacilar” con el publico para que lo canten sin parar. Seguro que este tema cae en su setlist de gira.
«Shadows over deadland» es una pequeña intro para «A nameless grave», que es la prueba de que no se olvidan de su etapa mas orquestal. Me ha recordado tanto a «From the cradle to the grave» que no he podido evitar ir a escuchar ese temazo. Medio tiempo con orquestaciones, denso y emotivo. Un gran recuerdo de su época orquestal y de su mejor obra, ‘XIII’.
Vuelve la caña con «Don´t let me down» en el cual se vuelven a asomar a su etapa más rápida. Riffs rápidos y batería trepidante que aflojan un poco para el estribillo pero sin perder la fuerza del tema. La mezcla casi perfecta entre el thrash y el power.
«Shine a light» es la balada del disco, buen tema, muy melódico y que al oír el estribillo te entran ganas de encender un mechero o la linterna del móvil y moverlo siguiendo el ritmo. Muy buena balada.
Le sigue la «HTTS 2.0″ (revisión de su clásico «Higher than the sky»). Buen tema reversionado a un sonido más actual y algo más rápida, sobre todo en la batería. La han dotado de un sonido más pesado y oscuro en la guitarra para que suene actualizada.
«Blame it on the truth» es el siguiente tema, en el cual vuelven a utilizar sonidos algo más oscuros y densos que le otorgan más fuerza al corte. Tema clásico de power con un puente en el cual bajan algo el ritmo para desembocar en un estribillo mas rápido y cercano al thrash que al power. Este tema es casi el resumen de lo que es el sonido Rage, con partes mas rápidas, partes más lentas, melodías y estribillos pegadizos y sonidos oscuros y brillantes a la vez.
Y cerramos el disco con «For those who wish to die», otro tema marca de la casa, con todos los
elementos que los caracterizan, otro tema 100% Rage.

En resumen, disco que te evoca a tiempos pasados pero con un sonido mas actualizado y que derrocha fuerza y energía en cada tema. Parece mentira que lleven tantos años haciéndonos disfrutar y que sigan creando tan buena música. Un firme candidato a disco del año y que deseo ver en directo en breve.

Enrique sobrino