Ñu-1

Calella RockFest 2019
Fabrica del Llobet (Calella)

Nueva edición del festival rockero por excelencia de tierras catalanas, el Calella RockFest. En su edición de 2019, sin dudarlo ya se asienta en cierta forma en el panorama, pero por otra parte no veo que sus seguidores le sean tan fieles como sería deseable. La verdad es que el lugar, la oferta y el precio tendrían que ser un gran atractivo para muchos pero, sea como sea, este año he visto como las esperanzas de unos cuantos que se desviven año tras año por mantener el festival no son recompensados por un público que posiblemente existe pero a veces no responde.
Por otra parte, la escasez de público no mermó para nada el resultado final, ocho conciertos en dos días en que todas, y digo todas las bandas y técnicos, se dejaron la piel en el escenario.

Viernes
Era un día laborable, lo cual no quita que algunos se desplacen desde muy lejos para gozar del festival. Para empezar una banda de Barcelona, en plan rock sureño, llamados The Grassland Sinners. Ya llevan un tiempo tocando en sitios pequeñitos y siguen presentando su disco debut, un no menos sorprendente ‘Let it ride’ editado en 2017, aunque por lo que se puede escuchar ya tienen un tema nuevo a nuestro alcance. Su concierto, como todos sonó perfecto, una banda segura encima del escenario y tocando ese rock sureño que pese a no ser nada nuevo, sí tiene en su poder un toque especial que les hace distinguirse entre la multitud. Tocaron sobre 60 minutos y yo los disfruté desde el primer segundo. Fueron una gran banda para iniciar el festival.

The Grassland Sinners-3

A continuación le siguió Laurence Jones Band, una banda también relativamente nueva pero que ya ha roto esquemas en esto del blues rock. Forman parte de esa nueva hornada y han sido nominados por los entendidos de su país, Inglaterra, como una de las nuevas sensaciones a tener en cuenta. Y la verdad es que esta banda es realmente rompedora, en su mano tienen el haber creado una serie de canciones impresionantes y eso que nacieron en 1991 y tienen 5 discos en su haber. Empezaron con temas de su último disco, autodenominado igual que la banda, impresionante “Heart on fire”, “Take me” o “What would you do”. Tienen un directo muy potente, directo y profesional y te abducen desde el primer momento. Creo que fueron la gran sensación desconocida de todo el festival aunque por lo que me dijeron hay quién les sigue desde hace tiempo e incluso ha aportado cierto dinero para que esta banda tan impresionante pudieran venir al Calella RockFest 2019 así que gracias.

Laurence Jones Band-2

Le tocaba el turno al reclamo del festival, el amigo/colega de Bruce Springsteen, Southside Johnny And The Asbury Dukes. Muchos esperaban ver fans del “Boss” entre el público pero se pudieron contar con los dedos… Era la primera vez que esta banda tocaba por estas tierras y algunos le tenían muchas ganas, tocando temas de Springsteen como “Talk to me”, “All the way home” y “The Fever” o de Little Steven como los iniciales “Angel eyes” y “Forever” y alguna versión clásica, como ese final con “Having a party” de Sam Cooke, lo mejor de todo el concierto. Muchos músicos apoyados por una sección de vientos que no se escuchaba y con un resultado final flojo en el que también el volumen estaba más bajo. Yo creo que solo lo disfrutaron los más fans, a los demás nos supuso un verdadero bajón. La verdad, con la experiencia y trayectoria de esta banda en directo no me esperaba tal decepción.

Southside Johnny And The Asbury Dukes

Para terminar la jornada llegaban los también barceloneses, Schizophrenic Spacers que sonaron tremendos y cuya puesta en escena resulta directa y muy enfocada al rock más visceral. Los pocos que estaban allí les disfrutaron al máximo y la verdad es que no me esperaba una banda tan sólida. Un buen final para la primera jornada.

Schizophrenic Spacers-3

Sábado
Tras un día para disfrutar de la ciudad costera como es Calella en todos sus aspectos, que mejor que empezar la tarde/noche con más rock and roll. En esta segunda jornada empezamos con la banda local, esta vez fueron Silverflame. En la línea de rock sureño pero con mujer al frente, su concierto fue de menos a más. Les recuerdo hace un par de años en un bar local antes de los conciertos del festival pero esta vez, nada que ver. Ahora son una banda sólida y con un directo profesional. Allí estaban tres miembros de los también locales La Banda del Yuyu, pero esta vez arropados por una mujer que mostraba seguridad y que esta vez ayudaba que sus composiciones en directo mejoran mucho y eso siempre se ha de tener en cuenta.

Silverflame-1

Un buen inicio de jornada para seguir con la tormenta de Nueva York, The Liza Colby Sound. Esta banda está formada por un cuarteto liderado de forma absoluta por Liza, una mujer que cuando pisa el escenario se transforma en un torbellino, su forma de entender los directos es dejarse la piel, a veces incluso pienso que si estás por delante te puede ruborizar y atemorizar. Pero esos taconcitos tan estrechos, la forma de contonearse, moverse y a su vez tener una gran voz en plan soul le hacen subir puntos cada minuto de su actuación. A su lado tres músicos muy buenos, a destacar por su trayectoria al bajista que ha estado con Ozzy o Raging Slab entre muchos. The Liza Colby Sound basan su música en una mezcla original de rock de garaje, soul y rock y el resultado final es muy interesante. Todo en esta banda sabe a escuchado pero a su vez original, tienen un punto particular y eso como en todas las bandas les hace especiales, a su paso por Calella sin duda ganaron fans y si saben cómo llevarlo esta banda tiene futuro en la escena rockera de la actualidad, grande sin duda Liza…

The Liza Colby Sound-1

Los siguientes eran los segundos cabezas de cartel, al igual que el día anterior puestos a una hora bastante digna. Fueron los de Madrid Ñu, con la formación que ya grabara su último DVD, un lujo a primera vista y con un Jose Carlos Molina que volvía a Calella tras 42 años de su anterior concierto, en la playa a las 7h00 de la mañana y con Rosendo a las guitarras. Esta vez tenía a Manuel Arias como último miembro fichado. A mí me sabe mal hablar mal de esta banda ya que pienso que Ñu ha tenido altibajos a lo largo de su existencia y había encontrado una formación muy potente pero por los motivos que sean, quizá por el sonido que no acabó de cuajar, su concierto no fue del todo satisfactoria. En la primer aparte del concierto rescataron su primer trabajo, ‘Cuentos de ayer y de hoy’, algo muy acertado teniendo encuenta el precedente de Calella. En cambio cuando lo dejaron de lado la cosa mejoró pero no fue excepcional, salvaría “Preparan”, “El tren” y “Una copa por un viejo amigo” en donde la banda funcionó pero una lástima porque creo firmemente que esta formación es de lujo pero en Calella no tuvieron su día.

Ñu-2

Y para terminar el festival en su edición 2019 una banda de rock and roll con todas sus letras, los suecos Diamond Dogs que en su gira de reunión pasaron por Calella. Ya les había visto con anterioridad pero esta vez Diamond Dogs dieron el concierto adecuado para cerrar un festival, dieciocho temas a cada cual mejor. La banda salió a muerte encima del escenario y ya desde el primer segundo se pudo sentir que sería un recital impresionante con una banda con la adrenalina y el empaque adecuado para convencernos a todos de quienes tenían el mando en sus riendas esa noche. Diamond Dogs cerraron el festival por todo lo alto y todos salimos con la sonrisa entre los labios.

Diamond Dogs-1

Gracias de nuevo por regalos como este a todos los que están metidos y gastan tanto tiempo de forma desinteresada en mantener en nuestras vidas un festival de estas características.

Texto y fotos: Joaquim Valls