Calificación del editor
Salió el trabajo al completo cuando llevábamos dos meses de confinamiento y consumíamos música de manera compulsiva, y ya no pude parar de escucharlo. Desde la introducción galáctica de "Starsleeper" hasta el cierre perfecto de "Final Hour" en el que hacen un cierre magnífico como si de un musical de Broadway se tratara.
GATHERING OF KINGS
‘DISCOVERY’
RN Records
15 de mayo de 2020: La ciencia investiga el origen de la melodía en las frías tierras del norte de Europa. No es un titular, pero debería serlo a estas alturas. Que un grupo de colegas músicos se junten para pasárselo bien y salga un buen disco, puede ser casualidad. Que cambien los amigos, se vuelvan a reunir y salga otro gran trabajo, da pie a sospechar. Después de dos meses de su publicación, he podido disfrutar largo y tendido del nuevo trabajo del super grupo Gathering Of Kings, ‘Discovery’, y es para relamerse. ¡Quién me iba a decir a mí que iba a descubrir una de mis bandas favoritas en un «Eurovisión del Metal»!
Empezaron atacando con tres singles que no dejaron indiferente a nadie. «Heaven on the run» fue un primer single excelente, estando a la altura del primer trabajo, ‘First Mission’, con el teclado marcando el paso y la recuperación de uno de los vocalistas, Rick Altzi, cuya voz aporta ese rasgado tan especial y hardrockero. Cuando estábamos encantados con el primer adelanto, poniendo la barra de las expectativas a la altura de Saturno, sacan el órdago de fichar al enorme Jonny Lindkvist (Nocturnal Rites). Lindkvist se enfrenta en «Moonlight» a un teclado que reclama espacio a cada compás, reforzándose con capas y capas de melodías. Él resuelve llenando de dureza tanta melodía, como sólo él podría hacer. El último adelanto fue «Kiss from above» y nos vinieron a la cabeza mil comparaciones, que si se parece al «Story ain’t over» de Avantasia, que si al tema del disco anterior «Long Way From Home», que si tiene algo de Stryper… Para mí, otra muestra de que recogiendo el testigo de quienes han recorrido la misma senda, se pueden hacer temas frescos y nuevos, sin que haya que dilapidar el estilo.
Luego salió el trabajo al completo, cuando llevábamos dos meses de confinamiento y consumíamos música de manera compulsiva, y ya no pude parar de escucharlo. Desde la introducción galáctica de «Starsleeper» hasta el cierre perfecto de «Final Hour» en el que hacen un cierre magnífico como si de un musical de Broadway se tratara. Los fans de Apollo Papathanasio no pueden dejar de escuchar «Revelation» con ritmo a lo Whitesnake, actitud de pisar fuerte con el mundo a tus pies. La otra colaboración de Lindkvist, «December», hace que no puedas parar de cantar y culmina con un solo de guitarra que brilla y va dejado un rastro a su paso como un cometa. Para no dejar fuera a ninguno de los vocalistas, de Tobias Jansson hay que escuchar atentamente «Lorelei», donde la guitarra de Victor Olsson habla al teclado de Erik Wiss (Creye) y nos devuelve a cuando las respuestas entre instrumentos eran piezas clave en las canciones.
La marcha casi en su totalidad del aporte de The Night Flight Orchestra se ha notado en un segundo trabajo que toma un camino propio, alejándose algo del anterior, pero no lo suficiente como para que no se vea una continuidad, sobretodo en la calidad de sonido y la melodía. Otra gran puesta en escena de los fantasmas que le rondan por la cabeza a Victor Olsson (guitarrista y compositor mayoritario). Otra gran reunión (gathering) de músicos.
Ymir Peiró
Sin Comentarios