Calificación del editor

7
VALORACIÓN

rainover trascending

RAINOVER
‘TRANSCENDING THE BLUE AND DRIFTING INTO REBIRTH’
Wormholedeath Records

Parece como si Rainover estuviesen navegando a contracorriente de las mayores tendencias de la escena metal actual. De hecho, mientras que hoy en día quedan muy pocas bandas fieles al sonido típico del gothic metal de finales de los noventa, la primera obra de esa banda (que antes se hacían llamar Remembrances), originaria de Murcia tiene como un sabor a magdalena de Proust para quienes les gustaba esa época. ‘Transcending the Blue and Drifting Into Rebirth’ tiene al mismo tiempo un poco del Theatre of Tragedy de ‘Aègis’, del Paradise Lost de ‘One Second’, del Lacuna Coil de ‘In a Reverie’, del Tristania de ‘Widow’s Weeds’, del Tiamat de ‘Skeleton Skeletron’, del The Gathering de ‘Nighttime Birds’ o del Within Temptation de ‘Enter’. Pero lo tiene todo con un enfoque melódico bastante pop, similar a bandas más recientes como Delain o Evanescence, muchas veces con canciones directas y animadas.
Obviamente, Rainover tiene un excelente sentido melódico y combinan un poco todas sus influencias musicales, sin embargo logra a formarse una identidad propia.

Otro aspecto importante de la banda es la voz de Andrea Casanova, la cual es prominente en el disco. También se escucha una voz masculina secundaria, a veces de canto saturado, a veces limpio, en un estilo similar al de Nick Holmes y que solo viene para dar un poco de contraste de vez en cuando. Pero al escuchar al disco, queda claro que Andrea no necesita a nadie para que su voz brille. Nunca suena forzada como si necesitara demostrar algo, al contrario, siempre suena increíblemente natural, como si fuera paseando sin esfuerzo dentro de los temas musicales y, aún así, se hace muy versátil, a veces fuerte, a veces frágil, como una combinación del lado rock de Cristina Scabbia y la delicadeza aérea de Vibeke Stene, pero siempre con cierta sensualidad que, muchas veces, le hace falta a las cantantes de metal.

‘Transcending the blue and drifting into rebirth’ tiene sus imperfecciones y no está sobreproducido pero es parte de su belleza, una forma de espontaneidad, de autenticidad y, aunque ese disco salió hace ya seis años (la banda ahora esta a punto de salir su segundo disco), es una obra que merece que se la descubra por su sinceridad, por traer un poco del espíritu de los noventa y por el gran potencial que tiene la banda.

Vivien Scalbert
Corrección: Hellen Lasombra