KADAVAR
22.10.2017, Sala Bikini, Barcelona
Promotor: Madness Live! prod.
Otoño tiene una particularidad en la ciudad Condal. No acostumbra a diluviar como en otras ciudades europeas, pero sí que se presencian un aluvión de giras. Para esta ocasión, la sala Bikini de Barcelona acogía la presencia alemana de Kadavar. Nos cerrarían el fin de semana ofreciendo una buena dosis de rock stoner.
Antes de presenciar esas barbas frondosas en escenario, con los alemanes venían grandes acompañantes. Los primeros fueron los holandeses Death Alley que ofrecieron su rock, protopunk macarra ante una presencia algo escasa en la sala. Mucha energía y frescura fue lo que transmitieron esta joven banda en el escenario rememorando bastante a esos inicios del heavy metal de los 80. Cumplieron su objetivo que era el de ir animando el ambiente. Poco a poco la sala se iba llenando de gente para disfrutar de esta magnífica gira.
La penumbra conquistó la sala para dar entrada a la siguiente banda. Mientras se iba preparando todo se podía ir viendo algo fuera de lo común: la batería a pie de escenario y sin mirar al público. Los alemanes Mantar serían los encargados de repartir una buena dosis de sludge metal. Con solo dos miembros, no se trata de un dúo sino de un duelo. Un cara a cara entre una batería y una guitarra con una afinación bien grave. Y así empezó la descarga descomunal que realizan este dúo alemán. Mucha rabia en el escenario, mucha adrenalina expulsada para transmitir su expresión, su sentimiento que comparte en el escenario.
Tras sentir la “Era Borealis” en nuestros cuerpos llegaba el turno final: todo ya se veía evidente. La batería de Christoph “Tiger” se hacía visible en el centro del escenario con sus ventiladores a toda potencia. Todo se centraba ahí mientras que sus compañeros Christoph “Lupus” y Simon “Dragon” estaban más ocultos.
El trío de stoner Kadavar estaba listo para empezar a repartir su viveza y carisma en el escenario a base de una buena dosis de rock. Disfrutar de “Doomsday Machine”, “Black Sun”, “The Old Man” o “Living in Your Head”, entre otras, en riguroso directo demuestra el talento que transmiten la banda. La perturbada mirada que ofrecía The Tiger a su público y el virtuosismo que deleitaba no servía de excusa para perder en ningún momento el ritmo. Tampoco era de esperar que sonase mal, puesto que la sala escogida para llevar a cabo esta gira era la mejor elección. Sin lugar a duda, la sala Bikini de Barcelona se amolda a cualquier estilo de música que pasa por allí. Cuenta con una gran acústica y para rememorar ese sonido crudo de los 70 ha sonado a la perfección.
“New Rose” y “Come Back Life” fueron las dos canciones que Kadavar eligieron para despedirse del público catalán. Un concierto que acabó en un mar de aplausos en agradecimiento a las tres bandas que han pasado esta noche en la sala Bikini de Barcelona. Un domingo perfecto para acabar deliciosamente la semana.
Texto y fotos: Marc Laplana
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