En un año convulso para la música y el arte en general, los lanzamientos discográficos se han convertido en el principal reclamo para los fans que ven como el sector de las novedades está sobresaturado. Quizá por ello, un trabajo como ‘Maere’ resulta un valor seguro, un soplo de aire fresco y una apuesta ganadora. Harakiri For The Sky han facturado un disco largo, intenso y que satisface los paladares más exigentes. Charlamos con Matthias Sollak sobre todo lo que envuelve el presente de la banda y situamos su actividad en un contexto tan preocupante e incierto como el actual.
Por Marc Gutiérrez
EMPIRE MAGAZINE (EM): ¿Cómo está la situación del Covid en Austria?
MATTHIAS SOLLAK (MS): Ha sido bastante duro y hemos tenido cuatro cierres totales. Poco a poco las cosas van volviendo a la normalidad a medida que avanzamos con la vacunación. Hay nuevas normas para entrar en tiendas y restaurantes, por ejemplo, porque hay que presentar un test negativo. Esperemos que la situación de los conciertos se normalice pronto porque estar sentados y mantener la distancia no permiten tener sensación de ver un espectáculo. No entiendo que, con, las precauciones necesarias, no puedan celebrarse conciertos con normalidad.
EM: ¿Se retrasó la salida de ‘Maere’ por el Covid?
MS: De hecho teníamos el álbum casi listo y grabado poco antes del primer confinamiento en nuestro país pero simplemente no pudimos prepararlo todo en el tiempo que queríamos debido a retrasos en la planta de prensado de vinilos y esas cosas. Ahora estamos contentos de que finalmente haya visto la luz.
EM: Para mi gusto, uno de los mayores logros del disco es el tratamiento de las guitarras porque las melodías suenan muy limpias y el contraste con las voces es absolutamente maravilloso.
MS: ¡Muchas gracias! Las melodías siempre han sido el foco principal de mis composiciones para compensar la dureza de las voces y creo que la mezcla de esos dos factores es una especie de marca registrada de nuestro sonido y van de la mano.
EM: Escuchando la agresividad y la melancolía que transmite vuestra música ¿cual de los dos aspectos es más importante para tí?
MS: Uno no puede prescindir del otro, la mayoría de las emociones que intentamos transmitir pueden expresarse a través de la melancolía pero también con rabia e ira. Las historias que cuentan nuestras canciones necesitan de un equilibrio entre esos elementos.
EM: ¿Porqué escogisteis hacer una versión de “Song to say goodbye”? ¿Qué tiene de especial esa canción para vosotros?
MS: He sido fan de Placebo desde que era niño y JJ también tiene fuertes conexiones con esta canción en particular y por ello pensamos que su elección sería adecuada ya que el ambiente en general en cuanto a melodía y letras parecía una buena elección para tocarla con nuestro estilo.
EN: Algunos de vuestros músicos de directo llevan con vosotros como diez años ¿habéis considerado la opción que sean miembros permanentes?
MS: Como todo el proceso creativo y las grabaciones las llevamos a cabo solo nosotros dos nunca hemos hablado de ello. JJ escribe las letras y yo la música. También hemos cambiado la banda de directo de forma regular en los últimos tiempos porque algunos de nuestros músicos tienen otros trabajos y no pueden afrontar las giras. Así que de vez en cuando tenemos que cambiar de músicos.
MATTHIAS SOLLAK
EM: ¿Qué os motivó a llamar a Neige de Alcest y al vocalista de Gaerea para colaborar en el disco?
MS: Neige y Alcest siempre han sido una gran inspiración para nosotros y a medida que nos fuimos haciendo amigos y nos fuimos conociendo mejor pensamos que estaría bien trabajar juntos en una canción y estamos muy contentos que haya funcionado. Con los chicos de Gaerea somos amigos desde hace años y la voz encajaba perfectamente para la canción que hemos escogido, además que siempre es genial colaborar con amigos.
EM: Teniendo en cuenta las restricciones que aún quedan por el Covid ¿cómo va a ser la presentación de ‘Maere’?
MS: Hemos pospuesto la gira hasta 2022 para llevarla a cabo en las circunstancias más normales posibles. Estamos haciendo algunos shows en este tramo final de 2021 pero todo es muy frágil y las cosas pueden cambiar de una semana a otra por lo que hacer cualquier tipo de pronóstico es muy arriesgado.
EM: Para quien no lo sepa, eres miembro también de la banda de Folk / Pagan metal Byfröst ¿Qué diferencias hay entre componer para ambas bandas?
MS: Hace bastante tiempo que no compongo nada para Byfröst pero al final tampoco puedo identificarme con todo el concepto de la banda y sentí que no podía componer libremente por lo que se esperaba de mí. Con Harakiri For The Sky solo escribo lo que tengo en mente, libremente y sin restricciones y es mucho más gratificante para un compositor. La gente cambia y evoluciona con los años y para mí ese era el paso adecuado a tomar.
EM: 2021 marca el décimo aniversario de Harakiri For The Sky ¿Qué balance haces de estos años? ¿Has logrado los objetivos que te habías marcado para la banda?
MS: Si nos llegas a preguntar hace diez años donde estaríamos ahora, nunca hubiéramos imaginado estar en esta posición. Todo el proceso ha sido lento pero constante y hemos puesto nuestra alma y nuestro corazón en la banda por lo que es realmente gratificante ver cómo nuestra música llega a la gente. Tenemos muchas cosas previstas y esperamos poder anunciar pronto todos los conciertos que hemos tenido que posponer y cancelar en el último año.
EM: ¿Tenéis algo especial planeado para este décimo aniversario?
MS: Sí, tenemos algo… pero no podemos decir nada aún. Espero que esté terminado antes de acabar el año.
EM: Vuestros discos ‘III: Trauma’ y ‘Arson’ han sido nominados para los Metal Hammer Awards y los Amadeus Austrian Music Awards en 2018 y 2019 ¿Cómo os hace sentir eso?
MS: Estuvo muy bien pero al final, si comparamos, lo más importante es el apoyo y la respuesta de los fans.
EM: Si mal no recuerdo habéis tocado dos veces en Barcelona, una junto a Perennial Isolation y Shores of Null y la otra con Der Weg Einer Freiheit? ¿Qué recuerdas de esos conciertos?
MS: Fue bastante caótico pero lo pasamos muy bien. Barcelona es una ciudad increíble y la gente es genial así que volveremos a Barcelona el próximo año.
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