Calificación del editor

Black Metal para gente a la que no le guste el Black Metal

8
VALORACIÓN

vvilderness

VVILDERNESS
«DEVOUR THE SUN»
Autoeditado

Si hay algo mejor que un coctel de géneros musicales yo no quiero saberlo. Y es que, pese a que a los más auténticos del lugar les parezca un martirio, así es como evoluciona la música y el propio género en sí.
Tratándose del disco que nos ocupa, Black y Folk Metal nunca han estado especialmente distanciados y, por tanto, no traiciona especialmente la norma no escrita de los conservadores. En lo que transgrede este “Devour the sun” es en que ninguno de estos dos géneros, que son los que la mayoría podrían considerar la base, está ahí como tal. La música de Vvildr, que así se llama el único miembro del grupo, encargado de absolutamente todo, no pertenece a ninguno de ellos. Es más libre que todo eso. Y ahí está el quid de su cuestión. Este nuevo trabajo de Vvilderness gustará a aquellos que gocen del buen Rock y Metal ambiental, pero también podría interesar a los más curiosos que no se sientan cercanos al género y a la música más extrema. Y es que, pese a que los elementos están ahí, lo que prima es la creación de atmósferas, densas pero luminosas. Claros de bosque de árbol alto a través de los cuales se cuelan rayos de luz. La épica de las montañas cubiertas de bruma llega a nuestros oídos en forma de imagen tan potente como inconfundible.
No en vano el propio Vvildr describe su propia música como “Black Metal para gente a la que no le guste el Black Metal”. Y es que a ello me refería cuando decía que este trabajo puede gustar a aquellos que no son devotos de lo extremo, pues no solo las guitarras empapadas en absoluta épica chorreante de luz camuflan la intensidad de guitarras sucias o blast beats martilleantes, si no que la producción del disco suaviza el efecto de estos al convertir en ecos cada uno de sus elementos. Gritos guturales a medio camino entre la voz del averno o la de la montaña en forma de viento. La comunión de elementos a partir de la mezcla convierte este trabajo en algo muy único, y especialmente difícil de llevar al directo, imagino.
Es realmente importante, y desde luego interesante para aquellos a los que le guste descubrir de donde vienen las sensaciones que nos crea la música, darse cuenta del minucioso trabajo que hay en producciones así, que van mucho más allá de una buena técnica y composición.
Toda esta violencia concentrada se encuentra orquestada a partir de una delicadeza digna de la labor del relojero. Y lo más importante es que pese a ello funcione luego como algo orgánico al oyente. “Devouring the sun” realmente consigue ese efecto, y es por ello que creo que puede hacer las delicias de los más aficionados a este tipo de producciones. Y, sin embargo, me agrada mucho poder destacar que se trata de un trabajo mas accesible de lo aparente.

Titus Bellés